Mito 1: El código de control
Es un dígito de control. (Editado el 21/10/2013)
Mito 2: ¿Los números de los muertos?
Las cosas que se pueden llegar a aprender en la red.
Desde un principio, y con un método aún vigente, los números del DNI se asignaron por lotes a los equipos de expedición. Así, cada comisaría o equipo móvil que tramita el DNI, cuenta con un margen suficiente de números libres. Si agota ese cupo, se le otorga un nuevo lote, no necesariamente correlativo al anterior.Se destierra así una falsa creencia. Los números bajitos del DNI no correspondieron en el pasado a personas que ya han fallecido.Nadie ostenta «el número de un muerto» como se afirma sin fundamento en conversaciones de bar. La Unidad de Documentación de Españoles de la Policía tiene colchón suficiente para no recurrir a esa técnica. En 54 años, se han expedido unos 60 millones de carnés y aún hay otros 40 millones libres hasta que se alcance la cifra de 99.999.999 carnés expedidos. No hay motivo para el mal fario.Cada españolito estrena número y no hace falta resucitar el guarismo de nadie. Porque el número del DNI es perpetuo por motivos legales.Además es personal e intransferible. Baste con pensar en transmisiones de bienes, en testamentos, en préstamos bancarios y suplantaciones de personalidad. En gente que muere y vuelve del otro mundo por la gracia de tener el mismo número del carné. «El DNI es como el Cid Campeador. Sigue ganando batallas después de muerto», señala entre sonrisas el comisario jefe José Santiago Sánchez.
Tal y como rezan los viejos libros de primera inscripción, -celosamente custodiados por la Policía-, la numeración se asigna por provincias y equipos. La comisaría de Santa Engracia en Madrid tuvo el privilegio de tramitar los primeros carnés. Echando un vistazo al primer volumen de registro, queda patente el culto a la personalidad del Generalísimo. El número uno se lo adjudicó para sí Francisco Franco Bahamonde. Cuestión de galones. El segundo llevaba el nombre de su mujer, Carmen Polo y Martínez Valdés. Para su hija Carmen Franco Polo fue a parar el número tres. Del cuarto al noveno han quedado vacantes. Del 10 en adelante y hasta el número 99, se bloquearon para la Familia Real española. El número 10 se le asignó a Su Majestad el Rey, el 11 para Doña Sofía de Grecia, el 12 para la Infanta Elena y el 14 para la Infanta Cristina.La superstición dejó vacía la casilla del 13. El DNI de Su Alteza Real el Príncipe Felipe luce el número 15, o niña bonita, un guiño inesperado del destino ahora que suenan campanas de boda real. Es lógico pensar que los pequeños Felipe Juan Froilán, Victoria Federica, Juan Valentín, Pablo Nicolás y Miguel, -último nieto de los monarcas hasta el momento-, sucedan a su tío el Príncipe en la correlación de números.
2 comentarios:
A la cama no te irás, sin saber una cosa más.
La verdad es que lo de que "hay X personas que se llaman exactamente igual que tú" sí que tenía sentido para mí (por ejemplo habría sólo 8 como yo, o 3 como mi novia que tiene unos apellidos muy poco comunes). Pero dejó de tener sentido el dia que vi que de un tal "José García López" sólo habían creo que 6. Hombre, juntando a todos los que viven en, yo que sé, Katmandú, pues igual sí. :)
Y tambien era raro que no pasraran nunca de 9 ¿verdad? jeje :)
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